traduce esta pagina

viernes, 1 de mayo de 2015

Vargas Vila, antiimperialista


vargas-vila
Hernán A. Ortiz Rivas
"Vargas Vila, por encima de todo, defendía las libertades públicas con sus palabras envueltas en rayos, truenos, centellas, sin buscar sus fundamentos sociales, políticos o jurídicos, que no le importaban, porque primero estaba su estilo literario que era un látigo altisonante".
A finales del siglo XIX, y primeras décadas de la centuria siguiente, la sociedad colombiana avanzaba firmemente en el proceso de consolidar el modo de producción capitalista, al mismo tiempo que se iba implantando la ideología burguesa, producto de la modernidad europea; situación histórica que estuvo penetrada por la dominación del imperialismo norteamericano, que había saqueado al canal de Panamá, perteneciente a Colombia, hasta los primeros años del siglo XX.
Durante este periodo, que cubre un poco más de siete décadas, vivió José María de la Concepción Apolinar Vargas Vila (Bogotá, 1860-Barcelona, 1933), cuya infancia y juventud las pasó en tierra patria, la edad madura en Venezuela, Cuba, y especialmente en Europa: España, Italia, Francia, Alemania, donde se dedicó a escribir una obra voluminosa, muy leída en Latinoamérica, obra que debe entenderse en el contexto histórico señalado al comienzo.

El enemigo el yanqui

En el presente escrito, con suma rapidez y ligereza, nos referimos a su antiimperialismo, contenido en el libroAnte los bárbaros. El yanqui: he ahí al enemigo, dejando para otra ocasión su crítica a la religión católica, los gobiernos de su tiempo, como la Regeneración de Núñez, los viajes, las memorias, que son textos de antología literaria e histórica.
De más de cien libros de Vargas Vila, publicados en vida, menos de la mitad pueden quedar como textos perdurables, que deben leerse con provecho e interés cultural.
El título de la obra que nos ocupa, por sí solo, constituye un grito de combate frente al imperialismo norteamericano, el máximo explotador de las riquezas de nuestras tierras, el dominador de todos los gobiernos de Latinoamérica, con excepción de la gloriosa República de Cuba, a partir de 1959, donde se estableció una auténtica Revolución, que ha inspirado los movimientos de liberación en Venezuela, Ecuador, Bolivia, Uruguay, Argentina, donde en estos momentos soplan vientos de cambio que marchan hacia el socialismo, nueva gesta de emancipación ante el imperio, que ha comenzado a ver el desmoronamiento de su explotación y dominio.
La obra de Vargas Vila contra el imperialismo norteamericano fue publicada en 1900, en la tipografía de Gaetano Pistolezzi, en Roma; de ahí en adelante se ha editado, en forma profusa, en muchos países de lengua española. Para los lectores que desconocen la pluma de Vargas Vila, dedicada a temas históricos, políticos, sociales, económicos, conviene prevenirlos de que él no trataba estos temas como un científico, sino mediante una literatura de combate muy adornada con frases llenas de fuego contra el enemigo, sea un gobernante, un momento histórico, una nación, un sistema socioeconómico o jurídico-político, que incendiaba con su verbo, según sus propias palabras.
Vargas Vila, por encima de todo, defendía las libertades públicas con sus palabras envueltas en rayos, truenos, centellas, sin buscar sus fundamentos sociales, políticos o jurídicos, que no le importaban, porque primero estaba su estilo literario que era un látigo altisonante.
Ante los bárbaros. El yanqui: he ahí al enemigo se debe estudiar como un libelo, lleno de palabras, que encierra un grito de guerra contra un enemigo: el imperialismo norteamericano, que desde fines de siglo XIX se apoderaba de las tierras liberadas por Bolívar, San Martin, O’Higgns y tantos luchadores que no podemos mencionar en esta oportunidad.

Vargas Vila

La obra de Vargas Vila no es un estudio sobre el imperialismo norteamericano, desde un punto de vista económico, político, o social, sino una denuncia literaria contra el enemigo mayor de los pueblos del mundo a partir del siglo XX. En un prólogo a su obra de 1923, Vargas Vila dijo: “Toda la literatura y toda la política antiyanqui de los últimos cinco lustros en América emanan de mis ideas, las teorías y las pasiones que forman este libro”. En gran parte tuvo razón al escribir estas palabras, porque él fue uno de los pioneros, en Colombia, en asumir una actitud antiimperialista contra Estados Unidos, posición que estaba envuelta con tempestades verbales, salidas de su pluma llena de fuego contra el imperio del Norte.
El antiimperialismo de Vargas Vila era radical, valeroso, le ocasionó muchos sinsabores en Estados Unidos, país de donde tuvo que salir a principios del siglo pasado. Más tarde, en agosto de 1915, escribió un pequeño ensayo, titulado Panlatinismo, donde emprendió de nuevo sus ataques contra el imperialismo norteamericano, el mayor enemigo de las tierras suramericanas, al cual se debía enfrentar con un panlatinismo, unión de todos los países “contra el yanqui”, montado en la doctrina Monroe; al imperialismo debemos combatirlo con el “panlatinismo”, dijo Vargas Vila.
Sin la menor duda, Vargas Vila fue un virtuoso de la diatriba, el vituperio, tanto que Borges dijo que él era el autor de “la injuria más espléndida” que había conocido en la lengua castellana; Rubén Darío lo calificaba como “luminosa diestra de Víctor Hugo, si hubiera nacido en Francia.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Portada de la edición definitiva de "Ante los bárbaros" (Barcelona, 1930)

Portada de la edición definitiva de "Ante los bárbaros" (Barcelona, 1930)
Portada de la edición definitiva de "Ante los bárbaros" (Barcelona, 1930)

IBIS - VARGAS VILA

Un fragmento de una novela que rompe con la narrativa en Colombia al inicio del siglo XX...

Entradas populares

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...